BIENESTAR 

6 errores a la hora de desayunar 

El desayuno es la comida más importante del día, y ello se fundamenta en que al despertarse el organismo viene de un largo periodo de ayuno, unas 8 a 10 horas, por lo que necesita reponer las energías que ha consumido durante la noche. 

Según explica Teddy Sawaya, creador del Método Sawaya y especialista en nutrición con más de 20 años de experiencia en el área, al desayunar el cuerpo recupera el combustible para cumplir mejor sus funciones diarias, el metabolismo se activa, y puede controlar el apetito; sin embargo, existen personas que, para perder peso, se saltan el desayuno y terminan compensando esa ausencia de alimentos con carbohidratos, generando el efecto contrario al que querían lograr, es decir, engordan. 

De igual forma, otras personas cometen errores al ingerir un desayuno que, aunque completo, es inadecuado porque no está balanceado según la combinación de algunos alimentos o sus requerimientos básicos.

Por ejemplo: 

1. No elegir bien los carbohidratos: estos se dividen en dos categorías: simples (harinas blancas, azúcar de mesa, etc) y complejos (cereales integrales, vegetales verdes). Estos últimos son los que se deben ingerir en la primera comida del día, ya que tardan más en digerirse y no elevan los niveles de azúcar en la sangre. 

2. Consumir con exceso de sal: esta es una de las causas principales de trastornos como la retención de líquidos y problemas de circulación, por ello el especialista sugiere evitar los alimentos procesados, grasas vegetales y embutidos, porque sobrepasan los índices recomendados de sodio. 

3. Olvidar las proteínas: los nutrientes esenciales que favorecen la formación de masa magra. Cuando se consumen a esta hora del día la sensación de saciedad aumenta y participa de forma activa en el incremento del rendimiento físico y mental. 

4. No incluir vegetales ni frutas: de acuerdo con las recomendaciones dadas por la Organización Mundial de la Salud, toda persona debe ingerir por lo menos 400 gramos de vegetales y frutas al día. El desayuno suele ser una hora bastante apropiada para incorporarlos, porque así se aprovecha su fibra, antioxidantes y demás nutrientes. 

5. Ingerir poco líquido: en las primeras horas del día, o al levantarse, el cuerpo pierde una cantidad significativa de líquido y sales minerales con la orina, lo que produce cierto grado de deshidratación. De allí que se recomienda beber antes del desayuno alguna bebida natural como una taza de té o agua tibia con limón. 

6. Comer poco: un café con un par de galletas no es un desayuno saludable, porque no aporta los nutrientes esenciales que necesita el organismo cuerpo para activas sus principales funciones. Esa escasez se traduce en horas posteriores en mayor sensación de hambre y debilidad física y mental. Un buen desayuno debe proporcionar un 25% de las energías diarias. 

A la hora de desayunar, es importante ingerir alimentos que aporten los nutrientes necesarios y combinarlos de la forma correcta para mantener al organismo satisfecho por más tiempo, de allí que la falta de tiempo no debe ser una excusa; en ese sentido, se recomienda planificar con antelación ese menú matutino que incluya proteínas y carbohidratos de buena calidad. Igual, se recomienda comer máximo una hora después de haber despertado. 

Para mayor información: Método Sawaya y Centro de Bienestar Sawaya Telfo: (0212) 753.0956 / 9997 Twitter e Instagram: @metodosawaya / Web: www.centrosawaya.com 

Fuente: Blue Marketing Solutions